Lejos es donde estás tú. ¿En qué ciudad? No me importa. Simplemente, lejos. Siempre que encuentro algo bueno, lo encuentro lejos de este pozo de perdición. De envidia y desolación humana, donde los sentimientos no son sino matices de un gris gastado.
Te encontré lejos, y lejos sigues. Pero eso da igual. Iría a donde demonios fuera si eso me permitiera ver una vez más tu sonrisa y el brillo de tus ojos. Vale, quizás me falte el dinero. Y seguro que las piernas me flaquean una vez me suba al autobús. Pero llegue a donde llegue, el día es largo. La noche, también. Y mientras me acompañe mi guiarra. The Truth. La verdad. Mientras me acompañe mi guitarra, siempre habrá alegría en mi pequeño mundo. Sólo espero que la gente sea capaz de verlo y me deje alguna propina para que, además de alegría, haya comida.
Por la música es que no me siento solo. Y por ti es que no me siento un loco en un mundo de cuerdos. Sino un cuerdo en un mundo de locos.
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