El dolor es la liberación de una mente atada a la realidad. Sólo a través del dolor podemos encontrar el camino a la nada, al punto cero. A olvidar todo lo que nos ata. Y volver a empezar.

lunes, 2 de enero de 2012

Let it roll

Deja atrás tu miedo y penetra hacia la oscuridad. Siente cómo te envuelve el mar de penumbras, cómo te destruye y te vuelve a crear. Cómo renaces y vuelves a crecer una y otra vez. Antes eras un trozo de barro, luego un pedazo de cielo. Al final, una muerte certera e inmediata. El dolor. El dolor que invade tu cuerpo hueso a hueso, desde la cabeza hasta los pies. Lo destruye todo, lo quema. Convierte tu cuerpo en un infierno del que no quieres salir. El calor te derrite y es tan reconfortante. Tan tranquilo y quieto. Y a la vez baila sobre la madera, rojo, amarillo y naranja como mil amaneceres en miniatura que nacen y mueren cada centímetro y entregan todo su ser para deshacer el mundo poco a poco. Siente cómo te invade el sol naciente y cómo la luna te espera en un lugar remoto. Destrúyelo todo y vuelve a empezar. Siente el odio en los ojos de los demás, devuélveselo en una pelea de bar. Lánzales botellas que explotan en fuegos artificiales de sangre, alcohol y cristal. Cristal transparente, invisible y que sigue ahí. Que corta y despieza todo ser y lo separa de su esencia. Cristal que ha nacido del fuego y que ha crecido en él. Cristal al rojo que, incandescente, da calor a la mañana y frío a la noche. Un Universo en una botella de ginebra que apuras para encontrar el fondo. Para ver que al llegar allí todo es nuevo e inesperado. Descubre que has llegado al otro lado y que sólo los chamanes pueden darte la bienvenida.