El dolor es la liberación de una mente atada a la realidad. Sólo a través del dolor podemos encontrar el camino a la nada, al punto cero. A olvidar todo lo que nos ata. Y volver a empezar.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Ya sabes quién

Sigues aquí. No hace mucho que me saludaste y me pintaste una sonrisa en la cara. A cada segundo tenía miedo de espantarte. De que pensaras "esto es demasiado para mí". Pero eso no pasó. Es curioso. A cada segundo que temía que huyeras, más me gustaba vivir con esa incertidumbre.
Sólo espero hacerte feliz, y lo sabes. Espero que, sea en el sentido que sea, pensar en mí te ilumine el día. Quizá sólo como un compañero de copas. Quizá sólo como alguien con quien hablar de Buda o Schopenhauer. Nunca se sabe.
Pero siempre así. Espero que te valga esta humilde misiva. Espero que te valga el saber que pienso en ti. Y no. Aún no sé cómo. Pero pienso en ti. Créeme: serás la primera en saberlo cuando en mi mente esté todo claro y cristalino como un riachuelo en una tarde de verano.